JUAN 15
“Yo soy la vid verdadera, y mi padre es el labrador”, Juan 15:1
“Yo soy:”
1. El pan de vida.
2. La luz del mundo.
3. La puerta de las ovejas.
4. El buen pastor.
5. La resurrección y la vida,
6. El camino la verdad y la vida.
7. La vid verdadera
Cada una de estas afirmaciones que empiezan con “Yo soy”, fueron expresiones contextualizadas al modo de vida del tiempo y lugar donde Jesús vivió, cada una tiene una gran enseñanza de la naturaleza misma de Jesús y a la vez nos transmite la idea que a Él le gusta ser parte de nuestra cotidianidad, quiere estar presente en nuestra vida diaria.
“Yo soy la vid verdadera” es de gran significado por que la vid al igual que el pan y las ovejas eran para los judíos la base de su subsistencia. También lo es para nosotros que sabemos la importancia de las plantas en nuestra vida.
La metáfora nos enseña que el ser humano fue diseñado a para estar conectado con Dios y que esa conexión se realiza a través de Jesucristo, quien se compara con “La Vid Verdadera”. “Los pámpanos” somos todos los que estamos cerca de Él, es decir los que nos identificamos como creyentes.
Existen dos tipos de pámpanos:
1. El que no lleva fruto. Este tipo de pámpano será quitado de la vid por el Labrador (Dios). No da fruto porque decide no permanecer en la vid, aunque parece estar conectado, pero no deja fluir esa savia de vida de la Vid, “El que en mi no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden” (V6). Estos pámpanos, son las personas que dicen con su boca que son creyentes pero su falta de fruto demuestra lo contrario.
2. El que lleva fruto. Este pámpano será limpiado por el Labrador para que lleve mas fruto. Este tipo de personas comprenden que una rama por si misma no puede sobrevivir ni dar fruto, así que decide permanecer bien conectado a Jesús y nutrirse de la savia de la Vid verdadera, que es la fuente de vida, “… el que permanece en mi y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mi, nada podréis hacer… En esto es glorificado mi padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos” (V5 y 8)
Para reflexionar: ¿Qué tipo de pámpano eres tú? ¿Cuáles son los frutos en mi vida que muestran que permanezco conectado a la Vid?
ATENTAMENTE
"TRANSFORMADOS PARA SERVIR"
JOSÍAS I. GONZALEZ.
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